EN ESTA EXPOSICIÓN LOS VISITANTES PODRÁN DESCUBRIR EL OLOR DEL TALLER DEL ARTISTA FLAMENCO PETER PAUL RUBENS

La casa de fragancias Iberchem ha anunciado hoy una colaboración especial con el Museo del Prado de Madrid. Sumado a la trayectoria de la compañía explorando la relación entre las fragancias y las artes, el fabricante de fragancias ha colaborado en esta nueva experiencia multisensorial de la última exposición del Museo, “El taller de Rubens”, comisionada por Alejandro Vergara, Jefe de Conser­vación de Pintura Flamenca y Escuelas del Norte hasta 1700 del Museo Nacional del Prado. Los visitantes están invitados a descubrir su obra con la vista y el olfato, gracias a la fragancia creada por Luz Vaquero, en la que reproduce el olor del taller de un pintor de la época.

“Recrear el olor de la trementina me ha permitido viajar en el tiempo e imaginar como era el taller de un artista del siglo XVII. Espero que el visitante, aparte de admirar la obra de Rubens, pueda vivir una experiencia inmersiva experimentado el olor que impregnaba su obra. No solo el olor a trementina, sino también el de otros elementos presentes en su taller: la madera, los lienzos, las velas…”, comenta Luz Vaquero, directora creativa global en Iberchem y académica de la Academia del Perfume. “Al igual que en la pintura al óleo, las fragancias también son aceites, y los ingredientes, que son las materias primas con las que trabaja un perfumista, se entremezclan hasta conseguir componer algo sugerente y redondo”.

Sobre la fragancia

La trementina es el disolvente natural procedente de la destilación de la resina de pino que se usaba antiguamente para diluir pintura al aceite. Este olor impregnaba los talleres de los artistas de la época haciéndolos reconocibles. Hoy día, además, forma parte de la amplia variedad de olores con los que se puede trabajar en perfumería. Gran parte de los ingredientes con los que componen los perfumistas proceden de la naturaleza o están inspirados en ella.

Sobre la exposición

La exposición, que permanecerá en la sala 16 B del edificio Villanueva hasta el 16 de febrero y cuenta con la colaboración de la Comunidad de Madrid, está compuesta por más de 30 obras que incluyen pinturas realizadas por el maestro, otras pintadas por sus ayudantes y otras, resultado en diferentes grados de la colaboración entre estos y aquel.

El objetivo de esta exposición es mostrar, a través de uno de los pintores más prolíficos y exitosos de la Edad Moderna: Peter Paul Rubens, cómo los pintores europeos trabajaban en talleres y se valían de múltiples colaboradores.